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Una de las noches más terroríficas y esperadas por todos durante el año es la noche del 31 de octubre. Es una fiesta importada de los Estados Unidos, pero Halloween en España goza de una gran popularidad tanto en los adultos como entre los más pequeños. Sin lugar a duda, poderse disfrazar de zombi, bruja o vampiro es uno de los muchos alicientes que tenemos para celebrar esta ocasión.
¿De qué manera se celebra Halloween en España?
En España hay unas costumbres propias para poder celebrar la víspera de Todos los Santos. Tradicionalmente, esta fiesta está destinada a recordar a los difuntos. Por ello, el 1 de noviembre es un día festivo a nivel nacional y tanto la mayoría de negocios como escuelas están cerrados. Las familias españolas aprovechan este día para reunirse en los cementerios de la localidad y honrar a los muertos.
Las lápidas familiares son decoradas con flores y otros adornos, a la vez que se organizan comidas para reencontrarse con los diferentes miembros de la familia. Dependiendo de la zona, es tradicional comer castañas asadas y boniatos acompañadas de licor. Por otro lado, hay regiones que disponen de dulces típicos para la ocasión.
España es un país con una larga tradición católica, por lo que a lo largo del día se llevan a cabo diferentes misas en recuerdo de los difuntos. Aunque puede parecer que las celebraciones se llevan a cabo en un ambiente lúgubre, esto no es así. Las familias recuerdan a sus seres queridos en un clima de alta sociabilidad.
Celebrar Halloween en España
España es un país que integra diferentes culturas y tradiciones. Esto hace que el Halloween en España se celebre de manera diferente en cada territorio, lo que, obviamente, hace que celebrar Halloween sea una experiencia única y fascinante.
En Galicia hay una larga tradición celta. Según la tradición, en la noche de Samaín, que es como la llaman los celtas, la frontera entre el mundo de los vivos y los muertos desaparece. Los hogares gallegos colocan calabazas con velas en puertas y ventanas para espantar a los malos espíritus.
La sidra dulce y las castañas son algunos de los elementos más destacados en Asturias. Las familias recogen las castañas para posteriormente asarlas y comerlas. Luego se lleva a cabo la Ronda de las Animas Benditas, es decir, una oración por los muertos de la familia.
Cantabria también tiene una larga tradición celta. Se llevan a cabo diferentes desfiles como el de las almas en pena, el de las Guajonas (son unas mujeres ancianas con solo un diente y que chupan la sangre a los niños) o el de las hogueras, donde se realizan conjuros.
En el País Vasco la comida es un aspecto fundamental. Aparte de las castañas asadas es tradicional degustar caracoles en salsa y motokil. Los niños de La Rioja vacían las calabazas y las tallan con forma de calavera. Posteriormente, encienden una vela en el interior y recorren las calles pidiendo dulces.
En los pueblos de Aragón se hace un camino hasta el cementerio con calabazas iluminadas para poder guiar las almas de los muertos que están atrapadas entre los vivos. En Cataluña se toman dulces típicos como los panellets, así como boniatos y vino moscatel. La Comunidad Valenciana celebra en Alicante desde el año 1346 un mercado agrícola llamado La Feria. Se puede visitar antes o después de acudir al cementerio.
En las Islas Baleares cada isla tiene una tradición particular. En Ibiza y Formentera las familias prueban una cena a base de buñuelos, frutos secos y panellets. En Mallorca y Menorca antiguamente las personas se envolvían en sábanas y simulaban que eran fantasmas.
En la comunidad de Castilla y León, concretamente, en la ciudad de Soria, se representa la obra escrita por Gustavo Adolfo Béquer de El Monte de las Ánimas. Una historia de terror muy conocida. En Castilla-La Mancha, en localidades como Talavera de la Reina, Toledo o Madrilejos los niños se disfrazan de santos, sacerdotes o ángeles.
En Madrid, concretamente en Alcalá de Henares, se representa Don Juan Tenorio. En Andalucía cada provincia tiene sus propias tradiciones. Una de las más famosas es el pequeño Carnaval de Cádiz. También es muy conocida la fiesta de castañas y boniatos de Nerja.
Los mayores en Extremadura comen migas o gachas, mientras que los más pequeños van por las calles pidiendo castañas, dulces caseros, membrillos, etc. En Murcia, en la plaza de San Pedro se celebra un mercadillo de repostería tradicional. En las Islas Canarias, las familias se reúnen por la noche y recuerdan a los que ya no están. Esta fecha se conoce como la noche de los finaos, cuando se comen castañas y se toma vino.
Como puedes ver, Halloween en España es una fiesta con una larga tradición y muy seguida en todas partes. Te animamos a celebrar Halloween con tus seres queridos.
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